TU CASA A PRUEBA DE FRIO CON VENTANAS LEYRE
En Ventanas Leyre te ayudamos a tener una casa aislada del frio, el calor y el ruido.
Frío, humedad, corrientes de aire, ruido... Un sistema de
aislamiento inadecuado no sólo provoca incomodidades, sino que contribuye a
acelerar el deterioro de la vivienda. Además, las fugas de calor ocasionan
gastos de energía innecesarios, al margen de los costes económicos, ya que un
buen aislamiento permite ahorrar hasta un 40% de calefacción.
El refuerzo de los puntos por los que el aire puede entrar o
salir es la mejor manera de conservar el calor en invierno y el frescor en
verano. Para ello, no siempre es necesario realizar obras. En el mercado
existen distintas soluciones que se instalan de forma rápida y sencilla.
SELLAR LOS CERRAMIENTOS
Los acabados deficientes en ventanas, puertas y persianas
son los responsables de la mayoría de las corrientes que se producen en el
interior de un hogar. Colocar burletes o tiras autoadhesivas de vinilo o
silicona en los marcos de las ventanas evita que se pierda entre un 5% y un 10%
del calor. El doble acristalamiento en las ventanas conserva el calor hasta
cuatro veces más que el simple. Los cristales, por su parte, deben estar
fijados al marco con masilla o silicona para que no queden rendijas. En cuanto
a las puertas, además de sellarlas con burletes, no es mala idea instalar un
perfil especial que la cubras totalmente. La caja de la persiana es otro punto
de fuga. Lo mejor es cubrir los posibles huecos con masilla o silicona y situar
paneles de corcho en su interior. En definitiva, un hogar cálido y confortable
es sinónimo de buen aislamiento, sin olvidar que es la mejor forma de ahorrar
energía.
ESTRUCTURAS REFORZADAS
De todos los rincones de la casa, el techo es el lugar por
el que más calor se pierde. Los tejados a dos aguas son muy eficaces, ya que
forman en su interior una cámara de aire que aísla del frío y del calor.
También existen otras soluciones que no requieren alterar la construcción. Por
ejemplo, un falso techo, con placas de yeso laminado. Otra opción son las
láminas de lana de piedra o fibra de vidrio. Para repeler el calor, en las
zonas de climas cálidos, se recomienda utilizar una pintura reflectante que
desvíe la luz solar.
El suelo también es un lugar por donde se pierde calor y se
filtran humedades. La mayoría de las viviendas cuenta con capas aislantes desde
su construcción, aunque las más antiguas o expuestas al frío necesitarán
reforzarse al cabo de un tiempo. Existe un tipo de aislamiento denominado
reflector cuya función es dejar espacios de aire en el suelo. Otra buena forma
de conservar el calor son las alfombras, ya que lo absorben y retienen.
Existen muchas formas de aislar las paredes de una casa. Una
de las más populares son las paredes de ladrillo hueco, que forman bolsas de
aire que dificultan la filtración del frío. Las paredes de hormigón, por su
parte, absorben el calor y lo liberan lentamente, de modo que requieren algún
tipo de aislante adicional para que el hogar no se recaliente. Para proteger las
paredes de la humedad se recomienda cubrirlas con una lona plástica.
Si precisas más información, consejo o un presupuesto. Ponte en contacto con Ventanas Leyre sin compromiso.
infoestella@ventanasleyre.com
948 55 64 80
948 55 64 80
Comentarios
Publicar un comentario